Se promueven habilidades y actitudes de la ciencia, tanto en el contenido como en las actividades. Además, se busca acercar la ciencia escolar a la que desarrolla la comunidad científica.

Se propicia el trabajo colaborativo y se promueve la reflexión en torno a sus implicancias en la construcción del conocimiento y cómo la naturaleza de la ciencia está presente en el quehacer científico. Además, se fomenta el desarrollo del pensamiento científico y reflexivo mediante instancias en la que los estudiantes actúan como agentes cuestionadores de su entorno y con opinión.

Buscan apoyar, complementar y enriquecer la propuesta, respondiendo a la vez a la diversidad de estilos de aprendizaje y al desarrollo de la alfabetización digital.

Actividades centradas en la aplicación y transferencia del aprendizaje a nuevas situaciones y contextos. Buscan reunir información sobre cuánto y cómo se ha aprendido para que cada estudiante se haga cargo de su propio proceso.